Un hombre que se dice trans de la Columbia Británica, Canadá, ha demandado al Ministerio de Sanidad provincial por negarse a financiar la vaginoplastia que exigió que se le realizara en Bangkok, Tailandia.
El hombre, al que se hace referencia sólo como KW en los documentos legales debido a la prohibición de publicar su nombre, presentó originalmente una queja ante el Tribunal de Derechos Humanos de Columbia Británica (BCHRT) en 2019, alegando discriminación. KW afirmaba que el que se le negara la financiación para la operación fuera del país era similar a la discriminación basada en el sexo sobre la base de su condición de transgénero.
En su demanda judicial, KW insistía en que a una mujer no se le habría negado la misma vaginoplastia laparoscópica de colon sigmoide, un procedimiento que a veces se realiza en mujeres que nacen con trastornos extremadamente raros del desarrollo sexual. La cirugía consiste en utilizar secciones de tejido de colon extraído para crear la apariencia de una vulva y una vagina.
KW alegaba que no pudo solicitar la operación porque no encontró un especialista que rellenara su formulario de solicitud, y argumentaba que una mujer podría haber ido a un ginecólogo para hacerlo.
El Ministerio de Sanidad (MOH) de Columbia Británica trató de desestimar la demanda de KW alegando que no tenía ninguna posibilidad razonable de prosperar, pero le fue denegado en un fallo del 10 de mayo de 2024. El asunto se someterá a una vista.
El Ministerio argumentaba que no discriminó a KW, no le negó atención médica, ni lo trató de manera diferente “a cualquier otro beneficiario que solicite servicios médicos fuera del país”. También señalaba que KW no había completado totalmente su solicitud de cirugía, añadiendo que los procedimientos de vaginoplastia están disponibles en Canadá “y, por consiguiente, el sistema de salud pública no estaba obligado a financiar el servicio que [él] solicitaba en el extranjero”.
El Ministerio de Sanidad dio su aprobación para que KW se sometiera a una vaginoplastia totalmente financiada en GrS Montreal (hospital especializado en operaciones de “afirmación de género”, nota de la traductora) en octubre de 2017. Sin embargo, meses después, en enero de 2018, KW solicitó al Ministerio de Sanidad que financiara su cirugía en Bangkok, Tailandia.
Se le informó que la solicitud tenía que ser completada por un especialista en Columbia Británica, y no por un cirujano plástico de Tailandia.
Una carta del Ministerio decía: “Cuando la operación está disponible en Canadá, el especialista de Columbia Británica puede recomendar una operación fuera de Canadá. El especialista debe adjuntar a la solicitud artículos médicos revisados por pares que confirmen que la operación fuera de Canadá supondrá una diferencia significativa en el éxito de la misma. Se respeta sinceramente la recomendación de la operación; sin embargo, como la operación está disponible en Canadá, no se aprobó la cobertura provincial para la operación en Tailandia.”
Finalmente, KW nunca completó su solicitud y aceptó la vaginoplastia en GrS Montreal el 6 de enero de 2020. El hospital realiza vaginoplastia de inversión peneana, una operación en la que “se le da la vuelta” al tejido del pene para crear un canal similar a la vagina. Se trata de la técnica de vaginoplastia más común en Norteamérica.
Shannon Beckett, miembro del panel de BCHRT, escribió en su decisión de mayo que el tribunal también iba a considerar la discriminación por motivos de identidad de género, aunque KW no alegó tal cosa en su demanda. Argumentó que el Ministerio de Sanidad había hecho una declaración “problemática” al refutar la afirmación de KW sobre el acceso de las mujeres a este tipo de procedimiento. Beckett parece haber discrepado específicamente con la explicación del Ministerio de que las vaginoplastias “rara vez se realizan en mujeres cisgénero, y sólo en casos en que es médicamente necesario (es decir, debido a enfermedad o lesión)”.
Beckett escribió que el uso que hace el Ministerio del término “médicamente necesario” ha “implicado que cuando las mujeres transgénero solicitan la misma operación, no es en casos ‘en los que es médicamente necesaria’. Este argumento parece basarse en ideas estereotipadas y obsoletas sobre la naturaleza y el motivo de la cirugía de afirmación de género. No hay ninguna indicación en el contexto de esta queja de que la atención de afirmación de género que KW solicitaba no fuera médicamente necesaria”.
Este argumento recuerda a una decisión procesal de 2019 de Devyn Cousineau, miembro de BCHRT, en la que calificó de “atención crítica de afirmación de género” a la solicitud del notorio transactivista Jessica Yaniv a que mujeres que no querían hacerlo le depilaron los testículos.
Aún no se han fijado las fechas de las vistas para la demanda de KW contra el BCHRT, y es probable que tarde meses, si no años, ya que el BCHRT se enfrenta a un enorme retraso de casi 5,000 expedientes activos.
Este caso no es el primero de este tipo en Canadá. A principios de este año, y como ya ha informado Reduxx (artículo en español), un hombre de Ontario demandó con éxito al Plan de Seguro Médico de Ontario para que la provincia financiara una operación experimental en Texas que le dejará el pene, pero le añadirá una “neovagina” creada quirúrgicamente.
El hombre en este caso rompió su propia prohibición de publicación cuando posteó él mismo sobre su fetiche de pañal en Reddit, y admitió abiertamente que él era el individuo protagonista del muy publicitado caso.
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